VIERNES DE LA X SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO, (Segunda Semana del Salterio)
SOLEMNIDAD DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
Solemnidad del Sacratísimo Corazón de Jesús, que, siendo manso y humilde corazón, exaltado en la cruz fue hecho fuente de vida y amor, del que se sacian todos los hombres (elog. del Martirologio Romano).
La liturgia de hoy se centra en el amor que dios nos tiene, simbolizado en el corazón de su divino Hijo, Jesucristo (cf. Primera oración). Ya en el Antiguo Testamento el profeta Oseas nos habla de ese amor de Dios a su pueblo: “Cuando Israel era joven lo amé” (cf. Primera lectura). En la segunda lectura san Pablo nos desea que comprendamos lo que trasciende todo conocimiento, el amor de Cristo. Y en el Evangelio se nos narra cómo el corazón de Cristo, abierto por la lanza del soldado, brotaron sangre y agua, los sacramentos de la Iglesia, para que así, “acercándose al Corazón abierto del Salvador, todos puedan beber siempre con gozo de las fuentes de la salvación” (Prefacio de la Eucaristía y Salmo Responsorial).
Uno de los soldados con la lanza le traspasó el costado, y al punto salió sangre y agua.
(Jn. 19, 34)
¡Paz y bien!
& Lectura de la profecía de Oseas. (Os. 11, 1. 3-4. 8c-9)
«Dios ha brillado en nuestros corazones, para que resplandezca el conocimiento de la gloria de Dios»
& Salmo Responsorial (Is. 12, 2-6)
«Sacaréis aguas con gozo de las fuentes de la salvación»
& Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios. (Ef. 3, 8-12. 14-19)
«Comprendiendo el amor de Cristo, que trasciende todo conocimiento»